Ésta página, nació para dar respuesta a una serie de buenos amigos que aseguran que se lo pasan bien con las cosas que escribo. Del “cuadrito” no hablo, aunque no desentonaría, entre lo que sale hoy; con toda modestia ¡garantizado!. Los nuevos, no me han enseñado nada.

Dije en su momento que no sabía si su interés estaba basado en el deseo, o en la caridad. A todos gusta que nos alaben, y a las seguidores de los productores de aucas, continuadores de los trovadores medievales y remontándonos antes a los mala milk de los bufones, muchísimo más. Si quiere que un comunicador le guarde eterna simpatía, cuando se lo cruce, dígale: “muy bueno lo tuyo”, se pondrá mas “lindo” que un pavo real en plena exhibición. Usted posiblemente no sepa el porqué; él, a lo peor tampoco, pero en su fuero interno ha sentido un “gustirrinin” muy especial. Ese día se sentirá el dueño del corral (la redacción).
La segunda causa, es la caridad. Quizás pensaron:”vamos a darle un poco de jabón a éste que ya está mayor”. Tratándose de compañeros de estudios, de oficio y artistas, es más que probable. Tan lejos como que ésta misma mañana, me lo recordaba, con rin, tin,tin, Teresa, de mi Editorial.

Mi sorpresa ha sido descubrir que son más de los que pensaba. “El contador, no engaña”. Y que antiguos amigos de otros países, se han acordado del compañero Toni, e inclusive, muchos nuevos profesionales han sentido curiosidad, por ver como lo hacían (dicho con toda humildad), las vacas sagradas del periodismo del siglo pasado.
La verdad es que con mis articulitos de vez en cuando iba matando la afición. Ahora me debo preocupar con que el Blog, tenga vida. Así que entre la página y escribir libros, ¡estoy ocupadísimo!.
Para que la página sea mas viva y resulte mucho más apetecible para el lector, les incluiré trabajos de otros compañeros que hablan y trabajan en nuestro idioma desde diferentes partes del mundo. Me gustaría que el blog fuera un pequeño referente para dejar claro que somos más de 400 millones de castellano parlantes.

A unos, a otros y a los de más allá, muchas gracias. Confío en no defraudaros.

martes, 22 de noviembre de 2016

MOVISTAR VS LA MÁQUINA

Está comprobado que este país esta condenado a empeorar, en lugar de mejorar con el paso del tiempo. Por ejemplo, en política: del ejemplo que maravillo al mundo en la transición, hemos pasado a la bronca permanente entre partidos, con derroche de mala educación, y pretensión de volver a la dictadura, de imponerse por la fuerza, el criterio de la minoría sobre el de la mayoría. Es decir vamos hacia atrás como los cangrejos. Esa manera de proceder, se contagia a la totalidad de la vida del país. La empresa, las grandes especialmente, no se libran “del mal a peor”., En ocasiones la aplicación de las nuevas tecnologías, desesperan y cabrean al personal. En lugar de agilizar entorpecen, ¿son capaces ustedes de dialogar con un maquina?........ ¡Pues imposible que el mencionado artilugio resuelva su problema!. Una de las empresas, en otra hora modélica, es la que peor camina emperrada en que usted se “aclare” con la maquinita; el cristiano termina maldiciendo al aparato, y acordándose de la familia de los directivos de Movistar. Tengo la ingrata experiencia de haber estado 5 días sin línea de teléfono y sin lograr hablar con un ser humano empleado de la compañía. La máquina lo ha impedido. Claro esta que cuando misteriosamente se soluciono la avería, repito al quinto día, la máquina me llamo para preguntarme sobre la calidad del servicio, mi respuesta fue: “¡Una castaña!”. Esto en otro tiempo no pasaba. Cuando era Telefónica Nacional de España, no camuflada con el “amorfo” nombre comercial de Movistar; una emergencia se solucionaba en unas horas y en unos minutos te atendía una persona que te daba toda clase de explicaciones. No se como sentaría esta forma de actuar, a mi pariente José Navarro Reverter, fundador de la Telefónica, la buena, la de antes. O a mi tía Rosita, jefecilla que fue, y que resolvía los problemas, simples o complicados, sobre la marcha, con una sencilla llamada.

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