EL PLANTE DEL PLANTE

No es un trabalenguas, ni una fea jugada, eso que antes se llamaba “una mala pasada”. Es otra realidad u otra curiosidad que nos depara la vida política del siglo XXI, y que corre de comunidad en comunidad, como “la falsa monea de la copla”. Cuando se reparten “calentitos”, la gente se espabila e intenta quitarse de en medio para que no le den . A nadie gusta el “que correga”. Pero cuando se les “toca “ el bolsillo, la cosa se pone tensa y crítica. Se asegura que mejor “prevenir que curar” y en el mundo de los dineros, se juega con mucho adelanto “por si acaso”. Hasta los que tienen menos luces, parecen trasformase de “pronto”, en seres super inteligentes. Una buena prueba de ello, nos la termina de dar el Señor Fabra, quien viendo que está más perdido que “Sant Pauli”, pierde más votos que otros aceite y estos últimos están en su apogeo; no ha tenido otra que en su intento de salvar los muebles, de su desahucio particular –entiéndase la autonosuya, refugio espiritual del PP, en este país- y que le culpen con toda justicia de ser el culpable, se a colocado el cuchillo entre los dientes, y se ha ido a Génova, a “cantarles por peteneras que son tristísimas”, es el primero de los plantes, pero no el único. A éste ha seguido otro mucho más peligroso, el de los empresarios, que han asegurado que no están por la labor, “no son partidarios” de la “parada” anunciada por el gobierno central en las inversiones en el antic Regne, sin hablar de la deuda histórica que es harina vieja de otro costal . Resumiendo, Fabra, se planta a Montoro, y los empresarios a Fabra. Todos andan, como se ve, con la “faca”, en la mano y dispuestos a usarla a la menor oportunidad que se presente. De la desinversión, protestan unos los fuertes, y se duelen y cabrean los que votan. Más difícil, cada vez, lo tienen los peperos en estas tierras, donde las aguas bajan turbias hace tiempo y como consecuencia del temporal el barco, viejo y sin reparar, hace agua, las ratas ya han empezado a abandonarlo; en la Consellería de Cultura, ha habido deserción en masa. Mal se están poniendo las cosas para el PP, a pesar de la ayuda de Puig, a quien parece interesar que no gane el PSOE.