BORRACHERA DE MANDO

Hay quienes aseguran que los borrachos y los niños dicen la verdad. Otros por el contrario afirman que con “copas” aparece la verdadera personalidad. Ambas cosas se están dando ahora en nuestro país, para bien o para mal. Pasadas las elecciones la “clase” política, se nos está descubriendo, casi tal cual es, porque algo se están guardando, para cuado lleguen al sillón de máximo gerifalte. Estamos viendo que “el coleta”, es menos “manso” de lo que nos ha “vendido” durante la campaña y sin llegar a mostrarse del todo tirano, algo se le ha escapado. También “el guaperas” deja ver que es un obseso por la Moncloa, y con tal de llegar a ella hará lo indecible y pactara con el que sea, aunque esté en juego la supervivencia del propio partido socialista. La meta de Iglesias, es hacerse con el dominio total de la izquierda, para conseguirlo solo le queda el PSOE, que tiene casi en el “bote” en connivencia con Sánchez, a quien sus barones acusan de prepotente, irresponsable y ciego. Cuando el que manda tiene que recordarlo, e imponerse a la fuerza, es que está en una posición de debilidad y de inseguridad manifiesta. Sorprende ver “al gallego”, con la nueva cara de fajador, hasta dialogante. Como ven los políticos, juegan “su partida” que nada tiene que ver con el interés y necesidades del país. Si no se produce un milagro, nos espera otra dictadura del proletariado, al más rancio estilo estalinista. Pasada de moda en la URRSS, y revitalizada por los populistas de nuestra universidad. A estos les siente mal el alcohol. Tienen mala bebi