AGARRAITOS

La música de tango la ponen ustedes. Los de la casta van muy, pero que muy agarraitos. No es necesario ser un lince para saber el porqué. Estos días se habla de bastante de que el run, run callejero se mueve en torno al viejo malestar de la ciudadanía, expresada en los corros mediáticos y en los bares, como que la solución a la crisis, pasa por la reconsideración de las autonosuyas. De ahí, se pasa al capítulo siguiente, en el ue se afirma que éstas son consecuencia de la diversidda de los pueblos de España. Una vieja milonga que se manejó en los años de la transición y que desembocó en la España que conocemos. Se estila, analizar cuales son las causas de la crisis. Terminados los argumentos anti “casta” sin resultado, se busca un nuevo “caso” para el entretenimiento de los tertulianos. Con cantaríto nuevo, agüita fresca; ¡todos a pontificar, dando lecciones magistrales de puras utopías!, no son ciertas, no sirven para nada, pero ante el público que “de lujo” como se dice por el sur. Que si la culpa es del reparto de la financiación; que si ésta es asimétrica, que si falta el grado de compensación por riqueza que hasta ahora parece no tenerse en cuanta. Total, como se afirma en castellano viejo: “excusas de mal pagador”. Mucho: bla,bla, bla, para ir matando el tiempo, pero meterle mano al rascacielos del desbarajuste administrativo, no hay…….(c…….) ni narices. Mientras tanto, como ne la canción: “…la vida sigue igual…”