QUE BONITO ES EL EQUIVOCO

Textual, la Cospedal dixit: “Algunos confunde la libertad de expresión con la violencia”. A la profesional de la política hay que replicarle con una frase que ella conoce muy bien y no la pronuncia: “Algunos gobernantes confunden, gobernar con dictadura”. Ella es clara, pues ¡toma “claridad”!, como diría Rokefeler, el pajarraco de José Luís Moreno. Por cierto que al Doctor le va muy bien con esta inseguridad de “última hora” de la clase política y dijo en Valencia que antes de tres meses pondría en el aire, una televisión de su “made in Moreno”. Según me cuentan tiene estudios, en los que fabrica sus programas que luego vende a las televisiones. Y está con un ojo puesto en “tele Madrid”, pero ésta tiene otros postores tan fuertes o más que él; suenan muchos nombres pero apunto uno en particular: Miguel Ángel Rodríguez, al tiempo. A la número dos del PP, hay que recordarle el refrán que dice: “el que no quiera polvo que no vaya a la era”. Por mucho que clame al cielo su colega y socio de partido Esteban González Pons, como le respondí hace unos días: en el sueldo y la “pitanza”, muy abundante por cierto, están incluidas las “pequeñas o grandes molestias” de los que nada tienen, o los están dejando desnudos y al relente. Los desahuciados están en su perfecto derecho de reclamar, y más después de que hayan sido por enésima vez engañados, por los que mandan que han dicho, montañas de veces que arreglaban el problema, y las cosas están tan mal como al principio, para los pobres y bien o mejor, para los muy ricos. Que yo sepa a nadie de los que están en la “casta” del partido que sea, les han obligado a meterse en política, al contario son ellos los que hasta se han peleado por entrar a formar parte del grupo de los privilegiados. Si no quieren pagar el coste, de la erótica del poder, el camino lo tiene libre y más fácil resulta salir que entrar. Con marcharse a su casa, problema solucionado. Ya nadie va a su casa a poner pegatinas, llamar a la puerta e insultarle en serie. Así que lo que tiene que hacer la presidenta de Castilla La Mancha, es ser humilde y cumplir con el principio que se supone, al buen político, servir al que le vota. Escuchar al pueblo, en lugar de amenazarlo. Tenga en cuenta que esto da muchas vueltas y hoy está arriba pero mañana seguro que estará abajo.¿Entonces que…?. Sin ser presidenta de nada y siendo una ciudadana de a pié, por mucho dinero que tenga, se las tendrá que oír y tragar como huevos de plomo, o como aceite de ricino, porque el pueblo tiene memoria y quien mal anda, mal acaba. Al paso que va su ciclo, cada día que pasa es más corto, no lo olvide. Y precisamente no va ganado “simpatias”.