UN DÍA DE ANDALUCÍA MÁS

Aquí abajo, estamos de fiesta. Por tener tenemos de todo: paro, más paro, economía sumergida, menos de la que había, hambre, ladrones, algunos por necesidad, los otros por afición y los que no saben hacer otra cosa que aunque digan que los persiguen, la jueza Alaya, es un ejemplo, salen todos los días. En esta zona demedio segunda vivienda y también de residencia permanente; se queja en el super, también en las fruterías y otros comercios y en los baretos hablan de movimiento pero de poquísima caja. Con ese panorama, al televisor y entre los destacados Miguel Ríos, el viejo rokero, discursea 20 minutos y se acuerda de Paco de Lucía, de los necesitados y la manda un recadito al ministro de justicia, recordándole que las mujeres son las que mandan en sus cuerpos. Luego la Presidente sermonea muy de acuerdo con el gusto de la audiencia, una locución “apañadita” en la que se renuncia “al trinque” y se pide por una mejora en el trabajo. Pero una cosa es lo que se dice y otra lo que se hace. Los profesores de la escuela Oficial de hostelería de Isla Cristina, que depende de la Junta de doña Susana. Llevan sin cobrar 3 meses y los proveedores se niegan a llevar material, con lo que los alumnos, están a base de pizarra y teoría, “catastroff” total. O sea que no desentonamos del resto de España.