¿QUIÉN DEVUELVE EL DINERO EN ESTE PAÍS?

No se trata de defender a la “viuda de España”, a la que antes del pronunciamiento del tribunal, ya estaba condenada. La polémica que ha surgido tras la lectura de la misma, no es que ha producido una alarma social, la cosa ha ido más allá, hasta el “cabreo” nacional. Otra vez más hablamos de un país de dos velocidades, la primera para el pueblo soberano, en la que se incluye el cumplimiento de la ley a raja tabla. La otra, más lenta, queda para los escalafones superiores y a medida que se sube, se nota el “cansancio” y se toman precauciones para que no “estalle” el corazón por el esfuerzo, a partir de ahí, despacito, muy despacito que estamos en igualdad de condiciones de una escalada al Everest, sin oxigeno y es peligrosa. Por eso los etarras se cachondean tras los cristales blindados del tribunal, y no pasa nada; es un ejemplo, mientras que a la Pantoja, la dejan entre la jauría y pasa lo que pasa, casi la linchan. Como he dicho en infinidad de ocasiones, igual que es tradicional que los españoles siempre vayamos con el clero: unas veces delante con un cirio; otras detrás con un palo; con el resto de los paisanos el trato es parecido, hoy estás en el altar, mañana te han mandado a los infiernos. Recuerdo para utilizarlo como metáfora, la frase de un colega cuando anunciaba una urbanización de lujo: “a un pitillo del centro”, pues en menos tiempo te arrojan a los “cocodrilos”. A la Pantoja, unos la despedazan y la quieren ver muerta, hundida y le niegan hasta el derecho a trabajar, faltando a los fundamentos de los derechos humanos. Otros la defienden a muerte, les da pena y son sus incondicionales: “ella no sabía nada el maldito era Julián, que la engañó abusando de su buena voluntad”. Lo que vale es la sentencia, que se ha visto muy pronto, mientras las corruptelas de los políticos pasan años y años, en la instrucción del sumario. Y los fallos de los tribunales se los pasan por la entre pierna, véase: “pasión de catalanes”, ante el desconcierto de Juan Español, que reconoce: “no entiendo nada”. Esta claro que si Isabel, devuelve el dinero con la cantidad que le han condenado, quedará libre, puesto que habrá cumplido. Por otra parte, su letrado ha dicho que efectivamente lo devolverá. Si es así, cosa que no hay que dudar, existirá un agravio comparativo, y otra vez se cumplirá algo que dije hace tiempo y recuerdo: Urdangarin y la Pantoja, serán los únicos que devuelvan el dinero que se les reclame. Mientras que los restantes pescados con las manos en el cajón, pasaran una temporadita, en el “Hotel rejas”, los menos de ellos, mantenidos por los españoles y cuando salgan se quedarán con la “pasta gansa”. Repasen los casos y verán que los precedentes se dan con continuidad y nadie dice nada. El yernísimo pagará porque el suegro, le obligara o en el peor de los casos podrá el dinero. Por aquello de dar ejemplo. Lo mismo que pasará con Isabel, para tapar bocas. ¿Y los ERES……..?........¡Muy bien gracias!. Es un decir, a más y más.