Esta misma mañana he tenido la oportunidad de escuchar a la Presidenta de la Comunidad de Madrid, expresarse con coherencia, con eso que en términos taurinos se llama: “vergüenza torera”, o lo que es lo mismo “estar en el mundo” o reconocer cual es la verdadera situación del país.
Esperanza Aguirre, ha dicho que tiene claro que para resolver la crisis del país lo primero que habría que hacer es devolver las competencias de: sanidad, educación y justicia, al gobierno central, con lo que se ahorrarían más de 45.000 millones de euros, pero que eso significa que sobran políticos, y que tendrían que buscarse otro trabajo.
¡Sombrerazo, para la señora marquesa!. Eso si es estar en el mundo y tener visión de la situación por la que atraviesa el país.
¿A cuantos de ustedes les suena eso mismo?. Yo lo he escrito en reiteradas ocasiones y somos muchos los españoles que pensamos que lo que fue España, no esta en condiciones de amamantar a tanto vividor, sin mas oficio que el de político en activo.
Estamos en manos de una banda de desvergonzados y caras duras, de los de: “vaya yo caliente que reviente la gente”.
El “morro” de los del nuevo oficio es enorme, y como muestra citaré una barbaridad que se cometerá en el Ayuntamiento del pueblo, como Dios no lo remedie.
El comité de empresa ha citado una reunión del personal que trabaja en el Ayuntamiento, tanto funcionarios como empleados fijos, para proponerles que se bajen el sueldo un 15%. La propuesta, lo han leído bien, es de los representantes del personal, los sindicalistas; a los que hay que preguntar ¿ a quien representan, si a los trabajadores o al poder?. A la vista de los hechos tampoco quedan dudas.
Mientras los “esquiroles” piden a sus compañeros que se bajen los salarios, el Señor alcalde ha dicho bien claro, que ni él, ni los concejales liberados, ni los consejeros, se van a bajar cinco céntimos sus emolumentos.
Por lo visto la crisis municipal es solo para el trabajador, no alcanza al resto de los ediles, el alcalde, ni a los enchufados, éstos tienen “patente de corso”.
Como verán con distinto color la cara dura de los políticos sigue siendo la misma y los sindicalistas juegan a la de ellos, a mantener sus privilegios, sin importarles lo que será de sus representados.
Esto pasa en Cartaya, un pueblo de 17.500 habitantes en manos de unos que se llaman independientes, cuando en realidad son escindidos del PSOE (el actual alcalde estuvo 4 legislaturas como concejal socialista y secretario del partido), en coalición con el PP, y con los andalucistas, que con un concejal, han enchufado a cuatro personas en puestos de teórica responsabilidad, algunos emparentados entre si.
Este ejemplo, lo verán repetido a lo largo y ancho del territorio de las autonosuyas. Los ayuntamientos están empeñados hasta las trancas, pero milagrosamente hay dinero para que cobren los políticos y sus aláteres.
Ustedes leen cada día que el ayuntamiento tal, debe X salarios a sus empleados y que las “criaturas” están al límite de sus fuerzas. Muchos viviendo de la caridad familiar.
El problema siendo serio, no lo debe ser para la clase política que continua más preocupada con sus banderías que con la solución al acuciante estado general; nada menos que la supervivencia del propio país.
La pregunta es:¿ pero alguna vez hubieron políticos con criterio y responsabilidad….?.
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