PEDRO J, OTRO QUE CREÍA EN LA DEMOCRACIA DE ESTE PAÍS.

La noticia es escueta y ha saltado de rotativa en rotativa y a ocupar espacio destacado en los informativos de los restantes medios de comunicación. Pedro José Ramírez , deja la dirección de EL MUNDO, eso parecía un imposible. Pedro J, había hecho fuerte al periódico y lo había colocado, en la cúspide de los diarios españoles. Su periódico, era el “fuerte” y libre de la democracia española, el único que disponía de una redacción de investigación de “cahapeau” y también el “capaz” de “sacudir” y sacar a relucir las vergüenzas, a rojos, azules, verdes y amarillos. Con la caída de la dirección del diario, la prensa española es menos libre. Se especula, sin confirmar que deja el periódico, “porque resulta moderno al poder”. Vamos……., la cosa está clara ¡es más que evidente, digan lo que quieran, que el motivo es ese!. Lo malo es que se confirma que vivimos en un régimen de democracia protegida o custodiada, desgraciadamente se comprueba con que para el poderoso, es decir “la casta”, los españolitos somos menores de edad a los que hay que proteger de gentes peligrosas, capaces de decirla verdad y descubrirles los trapos sucios. ¡Eso no lo pueden tolerar!, y como consecuencia, se llevan “por delante a lo que resulte molesto”. Bajo este mandamiento de la ley de los políticos, los primeros a los que hay que erradicar son a los del cuarto poder. Primero cerrarles la boca y luego hacerles la vida imposible. Si se van del país, tanto mejor. “Enemigo que huye, puente de plata”. Pedro J, cometió el error de sentirse amparado y protegido por su editora y la democracia. El fenomenal periodista y compañero, tendría que saber que estamos en España, donde en toda la vida de Dios, el brazo del poder es muy largo. Este hecho recuerda a otro de semejante trascendencia, el de Mario Conde, molestaba y ……..¡se lo cepillaron!. Fue para lo único que se pusieron de acuerdo González y Aznar. Recuerden que no se toleraban y aun hoy, solo se soportan. El Mundo, con el paso del tiempo de incomodo se trasformo en el “enemigo a batir” de la clase política y vaya que han ganado la guerra, la cabecera sobrevivirá, pero el contenido, la famosa línea editorial, ya verán si cambia, como de la noche al día. Sirvan estas líneas para solidarizarme con un compañero, que se creyó libre y murió profesionalmente en el intento. Has tardado en darte cuenta que lo de democracia en lo que era España, es solo, un decir. Un abrazo Pedro José.