LA VARA DE MEDIRSE Y LAS OTRAS

De todo este jaleo que trae a mal traer a los de las “casta”, que aunque lo niegan han vuelto a la horrorosa costumbre del: “tu mas”, en lugar de justificar de manera clara y diáfana sus actos. Que son corruptos….¡vaya noticia!, hasta los niños de párvulos lo saben y tampoco se escandalizan, lo de corromperse forma parte del decálogo del político, a partir de Felipe….González Márquez, para que nadie se despiste. Paralelamente a su paso por la Moncloa y para sobresalto de las generaciones siguientes escribí: Rambo, un pero sin carnet. Coincidiendo con la presidencia del sevillano, que colocó a su ciudad natal, como un dulce, basta darse una vuelta por las hemerotecas para saciarse de casos de “mangoneo y trinque” y de escaladas del enchufismo, basado en la posesión del carnet del partido. Desde entonces para acá, la cosa ha ido in crescendo, hasta situarnos en el siglo XXI con ober booking; tanto, tanto que las plantillas de las empresas públicas y las entidades y dependencias gubernamentales chorrean personal. El problema viene cuando con la llegada de la crisis, la clase se tropieza con el problema de la subsistencia. ¿A quien echamos. No hay dinero para todos?. Para cobrar nosotros hay que regularizar plantillas, pero…¿Qué hacemos con los recomendados?. El listo del partido, ha decidido que la solución es un ERE, con despido libre, encargado a una empresa con la que haya que quedar bien, para que “trinque” y que se salte los preceptos legales a la torera, respetando la permanencia de los enchufados. No importa que sean buenos o malos; tampoco que sean eficientes o que no tengan ni puñetera idea; lo que cuenta es que los recomendados se queden. Es otro ejemplo que en Las Españas, de las Autonosuyas. La ley es amoldable a las necesidades de cada cual. La famosa vara de medir que se aplica según convenga. Desde un tiempo a esta parte, ha adquirido “carácter” y existe una solo para los de la “casta”, y otras mas según el grado de proximidad con el poder, seguido del amiguismo y el clientelismo, para terminar mostrado todas su dureza, con el caballero o señora que “pasaba por allí”, es decir el paisano, que paga sus impuestos y mantiene toda esta orgia derrochona, protestando pero “hasta ahí”. “Dejadlos que protesten. Así se desahogan”, dijo recientemente el numero tres de uno de los partidos grandes, a sus compañeros con motivo de un reunión en un de las grandes capitales. Cuando un juez, que también esta cabreado, tira un poquito de la manta y sale la “mierda”, con perdón, hay que justificar lo injustificable y se saca del armario, la “vara” particular para justificarse. Ya sabemos que recibir sobres extra, no es “pecado” si se han declarado en hacienda. Por lo visto para estos señores el departamento de Montoro, es el Vaticano, donde se compran las indulgencias a precio de mercado y se venden las bulas, según a quien. Resulta divertido, por lo sangrante escuchar a la Señora Cospedal, o al “estrecho” de Rubalcaba, que desde hace unos días “se la coge con un confeti”, demostrando que de memoria está fatal. Vamos que los sociatas son el paradigma de la limpieza, ocultando vilmente que Filesa, Matesa, etc, se dieron siendo él ministro y que los grados de enchufismo tenían hasta oficina privada, regentado por el hermanísimo del vicepresidente de entonces, el compañero Guerra. El mejor de los ejemplos que pueden dar unos y otros, es trabajar juntos para sacar al país de la ruina. Sobran los “y tú más” y se necesitan pactos de estado. Están de más los Rajoys y Rubalcabas, junto con sus copias y clones y hacen falta personas con el talante de Canovas y Sagasta, gentes que amen y que les duela España.