VENGANZA, RESQUEMOR, O ITENCIÓN MANIFIESTA DE HACER DAÑO

Recordaran que es dije cuando saltó el tema que ya veríamos en que terminaba todo “el llamado caso Bárcenas”, y cada día que pasa la situación me está, otra vez más, dando la razón. Las partes implicadas en el asunto, están retrocediendo en sus explosivas manifestaciones del principio. Los dos periódicos que lo pusieron en circulación: El Mundo y El País, van caminando hacia atrás como los cangrejos. La reacción de la “casta”, lenta en principio, ha sido más peligrosa que sobre volar una mascletá. Para pasar por encima de un fabuloso jardín de explosivos y ruido, hay que ser un loco y no tener en absoluto apego a la vida. Para lanzarse directamente a la yugular de la “casta” hay que ser un suicida. Se conoce que los que han dado por buenos los famosos papeles de las cuentas en B, de Bárcenas, se han dado percatado del error y ahora están asustados. Todos los días quitan hierro, a sus primeras manifestaciones y donde digo: “digo, digo, Diego”. Les contaba que era público y notorio la “marcha atrás” de los interesados, cosa que se está cumpliendo con la precisión de un reloj suizo. La puesta en marcha de la justicia ante la alarma social, no ha hecho más que poner en evidencia que si los medios que han participado en “el destape”, pudieran borrarían al completo lo dicho y hecho. Ya ha quedado claro que si no aparecen los originales, las fotocopias judicialmente, carecen de valor. Para airear y tener contentos al personal, “el pan y circo”, se conforma en discutir si es o no posible decir si los papeles grafológicamente, pueden identificarse. En total, mas: “bla, bla, bla…” y pare de contar. Lo cierto es que hay interesados en vengarse del PP, y personalmente de Bárcenas; otros actúan por resquemor antiguo, añadida la envidia contra el partido y sobre todo contra las personas que aparecen señaladas. Por último, ha quedado demostrado que existe interés manifiesto de hacer daño, poniendo en cuarentena la honorabilidad, no ya del partido, más bien de las personas que están inscritas en el mismo. Esto es válido, no solo para el PP, también para el PSOE, como para los restantes. En su día, dije que cuestionaba la aparición repentina de los papeles de contabilidad supuestamente ilegal de Bárcenas. Trias, el principal testigo de la acusación tampoco ha sido contundente en su aserto y menos ha podido presentar pruebas, aunque fuera una sola. El abogado está dolido por que un su momento no se le contrató. ¿Venganza, resquemor…?. Todo el affaire, es cuando menos muy sospechoso. Lo dicho no está en contra de la contumaz corrupción en la que están metidos los de la “casta” sin distinción de “clase” o color. Los españoles esperan ahora la demostración real con pruebas de las acusaciones vertidas, y en caso contrario que se depuren responsabilidades. El hombre de la calle, harto de prevaricaciones, prepotencias y “golfos”, quiere que rueden cabezas. Sobre todo que reproduzca una renovación total, en el seno de los partidos, en los que hay que limpiar y blanquear en profundidad hasta los cimientos. El segundo punto, imprescindible es la reestructuración administrativa del Estado, reduciendo sensiblemente el número de servidores públicos, sobran muchísimos políticos en activo cuyo número hay que dejarlo, como máximo, en la tercera parte de los 450.000 que cobran religiosamente todos los meses. La economía del país no soporta tan gran carga. El tercer punto, compete a los partidos. ¿Quién o quienes han filtrado los documentos veraces o falsos y porqué?. El enemigo está claro que está dentro del propio partido. Cualquier mortal, no tiene ni conocimiento, ni acceso a ellos. Terminemos el pensamiento, con la verdad de Perogrullo. ¿Desde el Ministerio de Hacienda, no se dictaron unas normas por las cuales el que tuviera dinero fuera de España y lo declarara pagando una penalización, el 10% de lo declarado, quedaba libre del culpa?. ¿Esa norma, o ley, era para todo el mundo en aquella situación irregular, o solo para unos cuantos, con nombres y apellidos?. ¿Si era para todos….estará incluido el Señor Bárcenas, en el todos..?. En ese caso nos podrá sorprender que el ex tesorero, tenga 22 millones de euros, logrados en tan poco tiempo y podremos sospechar y elucubrar de cómo los consiguió, pero no de que haya infringido la ley. Cabe el revuelo por la sospecha de tener tantos “pavos” -entre ellos el que haya metido la mano en la caja- pero …………. Ahí se queda el asunto.