……..Y A CESAR LO QUE ES DEL CESAR.

La abdicación de D. Juan Carlos, está dando mucho juego. Los políticos se destapan y dejan sus vergüenzas al aire, lo cual permite reflexionar a los votantes. No hay nada mejor para descubrirlos que ver su oportunismo; con una presa más o menos fácil por delante, se les ve el trasero. Del mismo modo que se les pone “a los pies de los caballos”, cuando lo merecen hay que ensalzarlos cuando aciertan, que desgraciadamente son las menos de las veces. El president de la Genralitat de Cataluña, ha descubierto que después del dia 19, vine el veinte, seguido del veinte uno, veintidós, etc. Y que Los Estados, van a continuar por unos cuantos siglos más, en su continente, vaya el Señor Más, o se quede en casa. Rectificar es de sabios, asistir a la proclamación del monarca de España, un ejercicio de buena ética política. Bien en este caso por el ciudadano presidente y mal con respecto al directivo de CIU, que está empujando a Durán, a que el fundador de Unió, emprenda la retirada y dimita de sus cargos, se dice que en el partido y el Congreso, veremos si lo hace solo u otros militantes le imitan. D. Arturo, está totalmente desnortado y sin brújula es difícil retomar el rumbo. Las declaraciones de Homs, y el espectáculo de los castellers, por Europa, no invita más que al que puede le entren ganas de sacar a relucir el artículo 155 de la Constitución y terminar de una vez por todas, con las baladronadas u otras butades . Llegados aquí, de bromas las justas, lo mande Junqueras, o el lucero del Alba.