EL CUADRITO SI QUE VENDE

Por si alguien tenía duda, se ratifico el día de San Jorge, y el mismo “cuadrito” es la prueba. Basto mirar los “monos” que aparecían para que las gentes de éste país que vieron los reportajes, se encontrasen una vez mas, con los que ellos esperaban ver, así como los que tienen necesidad de “venderse”, para que los vean, lo hacían en el mejor de los mercados, y en manos del mejor de los comerciales y publicista, la “tele”. El mercado de las flores de Barcelona, el mágico escenario escogido para hacerse notar. Les recuerdo que en la ciudad condal, existe la tradición de tal día como el del santo que mató al dragón, regalar un libro y una flor, concretamente una rosa. Las cámaras salen a la calle en busca de la noticia y a “cazar” al popular de turno, de los distintos estamentos de “la popularidad”, con especial atención a los políticos y luego a los que se creen importantes en el capitulo de “la cronica social”. Las casetas aprovechan la ocasión para traer a los escritores punteros a firmar ejemplares de sus libros, es una formula mas de promoción y venta de un artículo que en este país se vende poco, sencillamente porque se lee menos. Que en la caseta de la “princesa del pueblo” haya cola, rubrica que el cuadrito vende, ¿como si no esa personita llamada Belén Esteban, sería la número uno en ventas de los libros editados en las Ex Españas?. Para que se enteren el señor Fabra y el señor Ciscar, El señor Más, salio del Palau de San Jordi, del “bracillo” de su “santa” ha darse un baño de multitudes y que lo retrataran saludando a los paisanos. Hay que hacerse el simpatizo y “cazar” votos, porque cada día están más caros. Es público y notorio que los canales catalanes, están a su servicio y funcionan la dictado, pero los que llamaría “nacionales” (españoles), no; esos hay que saberlos usar y el asesor de turno, le ha dicho: “Artur, es el día, anem al carrer”, para que la cosa parezca más natural, el president y la seua dona, se pasean por la feria y proximidades que es donde están las cámaras de televisión de España, a las que no manda, sonriendo a unos y otros. Buena lección para unos cuantos políticos del PP, que tiene que ir mendigando, su “minuto de gloria”, porque se han cargado al mensajero, su propia tele, y ahora no tienen “mercado” en el que venderse.