PORQUE AVANZA LA EXTREMA DERECHA EN FRANCIA

Para muchos comentaristas internacionales, el termómetro político de Europa es Francia, igual que para los expertos Alemania es el motor económico del viejo continente. La experiencia en lo: de la liberté, egalité y fraternité , y los “clientes” que han pasado por el invento de Monsiure Guillotine, es un argumento de peso. Los vecinos del norte son expertos en muchas cosas y liberales en el sexo, cunado aquí estábamos todos reprimidos, ellos patentaban la felación, etc. Los comparecientes que ejercen de nuevos pitonisos, en sus tertulias de los medios de comunicación, dan como argumento de fe, que políticamente hablando, los gavachos imponen la “moda” de lo que se llevará en política en el resto de Europa. Es la moderna cultura de la “moda” que como todos conocemos la dictadura de la “aguja”, se impuso en Paris, y desde allí se expandió a las restantes pasarelas. Si ustedes leen los diarios galos verán que la conclusión, directa, indirecta, matizada o a “las claras” es la misma. Los ciudadanos están hartos de la clase política, sin parase a distinguir cual es su afiliación; a todos los meten en el mismo capazo, aunque aparentemente más arriba de los pirineos, la corrupción e menor , o se “airea” menos, que de la frontera para abajo. La gota que ha colmado el vaso ha sido precisamente los problemas que crean, los inmigrantes o los franceses “ hijos de …” e inadaptados. Que nadie sabe cual de los dos casos es el peor. La reacción lógica de auto defensa, es apostar por los que dicen estar dispuestos a combatir ambos elementos. No es que la hija de Le Paine, sea mejor o peor que Holland, o que les caiga más o menos simpatica; puesto que un dechado de perfecciones morales no lo es. Su éxito es decirles a los franceses que los puestos de trabajo que haya, muchos a pocos, son para ellos y no para los que vengan de fuera. Y que en Francia, se va vestido a la “europea” y no con ropas culturalmente traídas de fuera. Como no se vive en guetos, encerrados para imponer otras formas diferentes y crear problemas, como resultado al resto de la sociedad. Para el francés de pura cepa, solo existe el “Vive la France”, que es una manera diferente y tradicionalmente conservadora, a su estilo, de ver la vida con respecto a como lo hacen los últimos llegados. Cuyos descendientes son la bolsa mayor de parados e inadaptados y delincuentes, del país. Cuando las barbas de tu vecino veas “pelar”, pon las tuyas a remojar.