Repasando la actualidad, tanto nacional como internacional, relacionada con un país antes llamado España, uno se pregunta lo que se escribe en el titular. Al parecer y por lo que mandan se trata de los peperos y ahora son los sociatas a los que les toca el turno de “la espera”.
Tendría que ser así, pero por lo visto hay fallos. Como ustedes recordaran la entrada en la CE, nos costó la perdida de nuestra industria pesada y todo lo que eso arrastraba. A Don Felipe González, le vendieron que seriamos el Inserso de Europa y por lo tanto nos consentían la Industria Turística y la del Ladrillo, porque los abuelitos tendrían que vivir en alguna parte. Golazo por la escuadra al Señor González Márquez. También nos prometían ser el “mercado” agrícola de la CE, junto con los otros países productores; digo yo si en el consentimiento estaba incluida la desestabilización de los agricultores franceses atentando contra los productos españoles en la carretera y la mala prensa de Alemania en contra de nuestras frutas y demás productos del campo.
Han pasado los años y ahora resulta que Marruecos, el del morito Mohamed, el que cuando no sabe que hacer monta huelgas y campañas de desestabilización en contra de las ciudades españolas de Ceuta y Melilla, o arremete con toda la fuerza de su policía, que no son angelitos precisamente, contra los viejos territorios españoles del Sahara, que se quedó “por el morro”; ese estado norte africano, que tantos dolores de cabeza nos causa, cuanta con la protección de la UE, y además recibe un trato preferente inclusive perjudicando los intereses de un estado miembro como es, teóricamente (ahora y a la vista de los acontecimientos hay que ponerlo bajo sospecha), eso que se denominaba España, cuando todavía pintábamos algo en el concierto internacional.
Ayer en Estrasburgo, nuestros socios se cargaron la agricultura española, sin ningún miramiento.
Lo poco que nos quedaba para vender: frutas y hortalizas, al “garete” y que vengan las del moro a los mercados de Europa, pero para mas “recochineo” pasando por territorio español. Encima sin pagar aranceles.
¿Don Mariano, consintiendo barbaridades como esa, quiere usted que se mueva la economía del país?. Con todos los respetos, en plural, no tiene usted ni idea. ¿Permitiendo con sus votos, ese “crimen” agrícola, termina de hundir la balanza de pagos y mandar a miles de personas al paro. Si ya sobraba mano de obra agrícola, ahora hay “mogollón” sin faena que hacer. ¿Quiere explicarme que hacemos con los magrebíes (para ser políticamente correcto), rumanos,, búlgaros y restantes llegados tanto del este de Europa, como de Sudamérica?.
La reserva, lo que quedaba de nuestra horto fruticultura, en otros tiempos envidia del mundo, era el paraíso del oro rojo y los cítricos, y las frutas rojas: frambuesas, moras, etc; algo que nos permitía poder afirmar que Huelva, era después de California, la mayor productora del mundo de estos frutos. Es decir contábamos con un campo especializado y de la máxima calidad. Eso se lo “cepillaron” ustedes ayer, en ese parlamento siniestro de Estrasburgo y con los votos del PP.
Los bien nacido en lo que queda de país, con el permiso del Señor Más, de Amaiur y del Señor López, no lo comprendemos. Que hasta nosotros, votemos contra nuestros intereses, es algo que no cabe en ninguna cabeza y desgraciadamente es lo que ha sucedido.
¿Señor Rajoy, usted está al servicio del Estado de las Autonosuyas, o de la Europa de la Merkel y Sarkosy?. La duda está más que justificada.
Está usted resultando más falso que los famosos duros de la época. Y Rubalcaba, sin peinarse, lógico, echándole la culpa del desastre, y ustedes haciéndolo responsable a él por la negociación. Efectivamente fueron unos chapuceros, pero los que han votado en contra de la agricultura española han sido ustedes. Demos a cada “cerdo” su San Martín.
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