Los tiempos se terminan como en el baloncesto y lo que todo el mundo mira es el tanteador del final del partido.
No importan los parciales y menos quienes se los adjudicaron, lo que preocupa es quien se anota los puntos en litigio.
Para el equipo de los sociatas se ha llegado al final del partido, precisamente hoy, con el último Consejo de Ministros, presidido por ZP. Al final del mismo, lo que tienen que haber tratado, es lo contentos que están de haberse conocido, porque con el sonido de la bocina, paco o nada se puede hacer, mas que aceptar el resultado final del encuentro.
El último portavoz del zapaterismo activo, ha sido D. José Blanco, Pepiño, para sus íntimos y metido en un lió gordo en el “caso Campeón”, para muchos bastante más grabe que el Guertell, en el que el mencionado Ministro fue el “martillo pilón”, con el que pretendió hundir a los peperos. Ya veremos como sale de escocido, de éste, el ciudadano Blanco.
En su comparecencia y obligado a decir algo a los “plumillas”, ha soltado una de botafumeiro “a todo trapo”; el gallegiño, en vista que nadie le decía nada, ha debido pensar, como es la ultima aparición en la “foto” y nadie nos ensalza, me ensalzare yo mismo y ha cargado a base de bien el incensario y se ha “largado” el incienso, como si no estuviéramos en “crisis”. Como era su despedida y antes del cierre……..
Adiós, Pepiño, adiós y que Dios, reparta suerte, que dice la gente del toro.
La foto del día es la de Zapatero y Rajoy, en la Moncloa; como si el cambio no estuviera “cosido” a “bajonazos”.
D. Mariano, es de poco hablar y hay que adivinarle las cosas, analizando en profundidad sus parcas palabras de gallego.
Como anticipo sabemos que nos la van ha meter doblada y eso no es bueno, sencillamente porque como ha mencionado en otras ocasiones, en éste país de las Autonosuyas, siempre el que se lleva la peor parte es la rama más débil de la sociedad. Desaparecida hace años la clase media, RIP en tiempos del felipismo, la pequeña burguesía que sustentó, durante décadas la sociedad española, solo dejaron dos divisiones sociales: los ricos, cada día más ricos; y los obreretes, también divididos en dos, los mil euristas y los cada vez más pobres, sobre quienes ha recaído, soportar el peso de todos los errores de los de la “casta”. Tanto los han apretado que en éste momento, la mayoría, ni dispone de trabajo, y lo que es peor, no tiene ni para comer.
El Señor Más, el más cínico de los mortales y encima resentido social, está castigándolos más y más, pretendiendo que su “sangre”, sea la redentora del país.
Usted Señor Rajoy, medio a filtrado que una forma para cumplir las expectativas con el ajuste del déficit, pueden ser, las mismas o semejantes normas que las de la Cataluña de CIU.
No me queda más remedio que recordarle que sus 183 escaños, no son para que continúe incrementándose la lista de clientes del INEM, por el contrario esos millones de votos son para que se termine con el paro y se genere empleo. ¿No se si me explico?.
Con ese convencimiento se le votó, en las generales y fue porque en la campaña usted apostó por generar empleo y no por mandar más gente al paro.
¡Ojo Rajoy, no se equivoque, que a usted, si le montan el pollo ya!.
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