Mientras que en los restantes países de la UE, está por bajo del 19%, en los menos desarrollados.
Los que me siguen, saben que he escrito hasta cansarme que éste es el país que más titulados superiores tiene por centímetro cuadrado que no saben comer.
La explicación también la he repetido en infinidad de ocasiones. Pues bien ahora les añado un adjetivo más: “desgraciados”. ¿Cómo juzgaría y consecuentemente adjetivaría, a una juventud que se pasa la vida estudiando para un mañana mejor, con el esfuerzo y sacrificio, propio y familiar y ya, con la titulación bajo del brazo pasa directamente al paro; el que tiene mucha suerte y/o padrinos, a desempeñar un puesto por bajo de su categoría laboral. Conozco muchos abogados de barrenderos y otros titulados, realizando trabajos de inmigrante, sin menos preciarlos, y los mas favorecidos trabajando en los servicios: la hostelería fundamentalmente.
Aquí, en el barrio, hay una camarera que es licenciada en químicas, y otra en psicología; eso sin escarbar, es público y notorio.
Para consuelo de dolientes hay que afirmar que los que tienen “curro”, se deben dar con un canto en los dientes, porque son los bienaventurados del sermón de los políticos que desgraciadamente mantenemos en el país; son los que han tenido el trébol de cuatro hojas, los que los parieron de pié, que dicen son “suertudos”.
El panorama no es triste, es tristísimo y para que levante el tiempo, tendrán que pasar años, en plural; con Rajoy, o con el
“susum corda”, da lo mismo.
Ya lo ha dicho públicamente que una de sus prioridades como Presidente en la legislatura que comenzará en días, es la reforma laboral.
¿Saben eso lo que quiere decir?. Sencillamente que los paganos de los desatinos de ellos, los políticos, otra vez serán las clases más débiles, como siempre los trabajadores y si se descuidan los abuelos. De los funcionarios, mejor ni mencionarlos; a esos les toca siempre por defecto.
A cuenta de los ajustes bancarios, que se preparen porque van unos cuantos miles, repito “miles” a la calle, por todos los sistemas permitidos y por la vía “criminal” también, no importa el hambre que se genere, lo que interesa es presentar unas plantillas lo mas holgadas posibles a los tiranos del BCE, para que no pongan más pegas.
Trabajadores del Estado Español, preparaos, porque vienen a galope tendido los: ERTES, ERES, prejubilaciones incentivadas, prejubilaciones a palo seco y despidos. Si no os gusta, tendréis dos tazas.
Eso que estáis pensando se queda como está. La inmensa nómina de vividores a costa de los demás, ni tocarla. Que sobran políticos por un tubo, lo saben hasta los niños de “teta”, pero hay que tener en cuenta que pertenecen todos a la “casta” y las “casta” es intocable.
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