Más que dolorosos, lamentables remedios, sencillamente porque a nadie le gusta verse en la necesidad de recurrir a los juzgados en defensa de sus intereses mas precarios, como son la simple supervivencia.
A ello se van ha ver abocados los funcionarios municipales y empleados del ayuntamiento de mi pueblo, si es que quieren garantizarse el cobro de lo que se les debe.
La pillería, está del lado del municipio que intentará ganarles por la mano.
Lo tienen muy bien estudiado, dinero no hay, llegar a las arcas municipales tardará tiempo, ¿Qué hacer?.¡Sencillo, plantear un ERE! Y a quien San Pedro se la de, San Pablo se la bendiga, que es lo mismo que: “ya te apañaras Blas”, o “el más listo come y los demás miran”.
El Señor alcalde, les pide a los empleados a sus órdenes que sean generosos.
Está claro que el Presidente municipal, tiene previsto mantenerlos a todos en su domicilio particular. El les invitará a comer y pagara sus gastos más precisos. Es el “negocio” a cambio de la comprensión y generosidad de sus subalternos.
Los pobres no tienen otra, que recurrir a la denuncia de la empresa pública que es el ayuntamiento. ¿Dónde?, sencillamente en Magistratura del trabajo, para que el Magistrado atienda su demanda y proceda al embargo de los bienes necesarios para garantizar el pago de los adeudos.
Parece novedosa la denuncia pero si se recurre a las hemerotecas se verá que no, que ya ha pasado en alguna otra ocasión.
Producirá escándalo, para algunos, la drástica medida y díganme: ¿no lo es que no se les pague a los que han cumplido fielmente con su trabajo, y con su soldada deben, a la vez hacer frente a otra serie de compromisos, que no van a poder?.
¿Quién es el incumplidor el pobre asalariado que no cobra y por consecuencia no puede pagar, o el despilfarrador del político, que ha gastado más de la cuenta, se ha endeudado hasta los ojos, y se niega a cumplir sus compromisos; mete de “macuto” a sus enchufados, sin ningún recato y para mayor burla solicita la generosidad del personal, a quien se “putea”?.
Lo peor no es el tener que recurrir al juez, es la cadena de problemas que el impago causará a los pobres empleados, el dineral que les costara en intereses de demora, la tardanza en el pago u la vergüenza de verse en la necesidad de comunicar a sus proveedores que no pueden cumplir. Pero hay mucho mas ¿Cómo van ha poder ir a la compra y con que dinero?. O es que Juan Roig, les va a permitir comprar a “ya te- pagare”; lo mismo digo del amigo Arias Salgado, en el Carrefour.
Y los políticos la mar de comprensivos aplazaran los pagos del agua, la luz y el gas….¡Jajajaja, que risa. O pagas o cortan!. A esos les importa un “pepino” que no pague el ayuntamiento. Para mayor escarnio la gasolina sube un 2,6% desde hace tres días. Significa que ir al trabajo donde no cobras, te cu esta más caro.
Es lamentable, pero si quieren garantizarse el cobro, no tienen más remedio que recurrir al Magistrado, para que intervenga y embargue, como medida cautelar y como segunda, que de por rescindidos los contratos por incumplimiento de los mismos a quienes les interese, con derecho a paro.
Todo ello, sin pausa, porque si se anticipan con el dichoso ERE, ¡tararí que te ví!. Ni cobas, ni comes, ni nada de nada.
Malas lenguas dicen que el poco dinero del que disponen es para congraciarse con ENDESA, a la que le deben una millonada, taparles la boca y que los de la eléctrica les den luz en el recinto ferial.
Los funcionarios no comerán, pero los del pueblo moverán la “calaverita” al ritmo de la orquesta que haya contratado el concejal de turno, o el enchufado del concejal, que será lo más probable.
Dinero para los trabajadores, ni un euro. Pero enchufados cada día hay más, es el milagro de la multiplicación de los panes y los peces, todos con carnet.
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