Se dieron mucha prisa en intervenir en Libia. De la noche a la mañana Gadafi pasó de amigo a enemigo pestilente y los puritanos del mundo decidieron quitarlo de en medio. Formaron una Coalición que al amparo de una resolución de las Naciones Unidas, les justificaba para provocar la destrucción en el pequeño país del petróleo y dejar un reguero de muertos y heridos en mayor número que los que había producido “el tirano” con su guerra.
Bien, la supuesta defensa de los libios, se ha producido, con el resultado hasta el momento de 200 fallecidos y más de 650 heridos.
Los toma watts norteamericanos, que cada uno vale una fortuna, han impactado en las residencias del Gadafi. No con intención de matarlo –según el portavoz americano- buscaban los centros neurálgicos de la defensa del coronel. Si han conseguido su propósito o no, dependerá de quien lo cuente. Los coaligados dirán que han tenido éxito, y los fieles al mandatario libio, que con lo de la puntería, los de coalición son muy malos. Nada que no esté en el guión previo. Inclusive el ataque de grandeur de Sarkosy.
El francés que en lo de “organizar “ Europa, se ha quedado fuera de la partitura de donde lo ha borrado la Merkel, quien junto a los chinos y otros tres mas se abstuvo de intervenir en la votación de la ONU. ¿Porqué?. Sencillísimo, no quiere ser blanco de los suicidas árabes, demostrando su talento para gobernar y su visión de la realidad de las cosas.
En Pekín y en Berlín, por ejemplo, no tiene tan claro como los otros, que el Gadafi, sea Belcebú, solo en horas, piensan en lo dicho por el coronel, ¿si fuera cierto que solo hay dos alternativas: o Gadafi o Al Qaeda?.
Los que hoy lo atacan, ayer negociaban con él, y sacaban buena rentabilidad al negocio. Zapatero, le facturo más de diez millones de euros, en armas. Berlusconi, tiene un tratado de no agresión preferencial que hace que el territorio italiano, no pueda ser usado por los coaligados; a pesar de él, los “grades” usan las bases en contra del libio, demostrando que las firmas, no sirven para nada, así podríamos estar nombrado uno por uno a los atacantes.
¿Qué ha cambiado, en las últimas horas?. Muchas cosas, por supuestos que los norteamericanos no tienen tan claro como antes una Libia sin Gadafi, ¿será por que les ha venido a primer plano Irak. O piensan en las torres gemelas?.
Los de la liga árabe, no están de acuerdo con en abuso de la fuerza que consideran desproporcionada. Ellos apoyaban para la guerra del coronel contra los insurrectos, pero nada más. Son otros de los que han quitado el pié del acelerador de la escalada bélica.
Bahrein, y los restantes países con problemas, se están preguntado ahora, ¿Quiénes son los que están enfrente del Gadafi?.
Algunos de ellos han pasado de la sospecha a la certeza que detrás del supuesto movimiento democrático, quienes están, son los no deseados: Al Qaeda o los fundamentalistas, que en lugares como Marruecos, se han unido descaradamente a los movimientos de protesta.
Ahmadineyad, que es uno de los que mejor información dispone, puesto que desde las mezquitas que controla, se predicó la subversión, dejaba caer en la entrevista que se le hizo recientemente su desacuerdo con quienes encabezan la inestabilidad. Precisamente, su país es uno de los que mira con más preocupación, lo que pasa en los otros países de la zona.
En la Casa Blanca, se han dado cuenta de pronto que una tercera guerra no es deseable. Ellos están metidos en dos con balance negativo en ambos casos. En Afganistán, está super claro que los países que intervinieron con intención de colocar un gobierno democrático, están perdiendo, y los vencedores son los talibán, los comerciantes de opio y los corruptos del poder, quienes intentaran “robar” lo que puedan hasta que se vayan las fuerzas invasoras, cuando ellos también tendrán que dejar el país.
Irak, no hace falta es “el yo pecador” de America. Lo reconoció Bush, el autor del lío, lo engañaron, de lo contrario continuaría Sadam, que si sabía como tratar a sus paisanos.
Lo cierto es que Libia, está sobre la mayor bolsa de petróleo y gas del Mediterráneo, y es demasiado apetitosa para todos los que intentan justificar su intervención, como ayuda humanitaria, cuando lo cierto es que lo quieren es la mayor parte posible en el reparto de la riqueza del subsuelo libio.
En palabras del Evangelio, unos y otros no son mas “que sepulcros blanqueados”.
La incógnita del día después, se queda en el aire y no tiene precisamente muy buena cara.
Bien, la supuesta defensa de los libios, se ha producido, con el resultado hasta el momento de 200 fallecidos y más de 650 heridos.
Los toma watts norteamericanos, que cada uno vale una fortuna, han impactado en las residencias del Gadafi. No con intención de matarlo –según el portavoz americano- buscaban los centros neurálgicos de la defensa del coronel. Si han conseguido su propósito o no, dependerá de quien lo cuente. Los coaligados dirán que han tenido éxito, y los fieles al mandatario libio, que con lo de la puntería, los de coalición son muy malos. Nada que no esté en el guión previo. Inclusive el ataque de grandeur de Sarkosy.
El francés que en lo de “organizar “ Europa, se ha quedado fuera de la partitura de donde lo ha borrado la Merkel, quien junto a los chinos y otros tres mas se abstuvo de intervenir en la votación de la ONU. ¿Porqué?. Sencillísimo, no quiere ser blanco de los suicidas árabes, demostrando su talento para gobernar y su visión de la realidad de las cosas.
En Pekín y en Berlín, por ejemplo, no tiene tan claro como los otros, que el Gadafi, sea Belcebú, solo en horas, piensan en lo dicho por el coronel, ¿si fuera cierto que solo hay dos alternativas: o Gadafi o Al Qaeda?.
Los que hoy lo atacan, ayer negociaban con él, y sacaban buena rentabilidad al negocio. Zapatero, le facturo más de diez millones de euros, en armas. Berlusconi, tiene un tratado de no agresión preferencial que hace que el territorio italiano, no pueda ser usado por los coaligados; a pesar de él, los “grades” usan las bases en contra del libio, demostrando que las firmas, no sirven para nada, así podríamos estar nombrado uno por uno a los atacantes.
¿Qué ha cambiado, en las últimas horas?. Muchas cosas, por supuestos que los norteamericanos no tienen tan claro como antes una Libia sin Gadafi, ¿será por que les ha venido a primer plano Irak. O piensan en las torres gemelas?.
Los de la liga árabe, no están de acuerdo con en abuso de la fuerza que consideran desproporcionada. Ellos apoyaban para la guerra del coronel contra los insurrectos, pero nada más. Son otros de los que han quitado el pié del acelerador de la escalada bélica.
Bahrein, y los restantes países con problemas, se están preguntado ahora, ¿Quiénes son los que están enfrente del Gadafi?.
Algunos de ellos han pasado de la sospecha a la certeza que detrás del supuesto movimiento democrático, quienes están, son los no deseados: Al Qaeda o los fundamentalistas, que en lugares como Marruecos, se han unido descaradamente a los movimientos de protesta.
Ahmadineyad, que es uno de los que mejor información dispone, puesto que desde las mezquitas que controla, se predicó la subversión, dejaba caer en la entrevista que se le hizo recientemente su desacuerdo con quienes encabezan la inestabilidad. Precisamente, su país es uno de los que mira con más preocupación, lo que pasa en los otros países de la zona.
En la Casa Blanca, se han dado cuenta de pronto que una tercera guerra no es deseable. Ellos están metidos en dos con balance negativo en ambos casos. En Afganistán, está super claro que los países que intervinieron con intención de colocar un gobierno democrático, están perdiendo, y los vencedores son los talibán, los comerciantes de opio y los corruptos del poder, quienes intentaran “robar” lo que puedan hasta que se vayan las fuerzas invasoras, cuando ellos también tendrán que dejar el país.
Irak, no hace falta es “el yo pecador” de America. Lo reconoció Bush, el autor del lío, lo engañaron, de lo contrario continuaría Sadam, que si sabía como tratar a sus paisanos.
Lo cierto es que Libia, está sobre la mayor bolsa de petróleo y gas del Mediterráneo, y es demasiado apetitosa para todos los que intentan justificar su intervención, como ayuda humanitaria, cuando lo cierto es que lo quieren es la mayor parte posible en el reparto de la riqueza del subsuelo libio.
En palabras del Evangelio, unos y otros no son mas “que sepulcros blanqueados”.
La incógnita del día después, se queda en el aire y no tiene precisamente muy buena cara.
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