SPAIN TOMORROW

Recuerdo mi época de estudiante y mis visitas a los estados. Creo que todavía no he superado que los norteamericanos, cuando les decía que era español, inmediatamente me preguntaban que de que país, siempre tenía que apostillar:”español de España”, con lo cual cambiaban hasta el tono de la voz. La otra tara, no superada está en el famoso: “España, mañana”.
Han pasado los años, ¿Cuántos…?.......¡Muchos, muchos. Mas de los que me habría gustado que pasaran!. Continuo, con el mismo sentimiento de enfado que entonces. Pero ahora me río, la causa es que paso muchos meses al año en Andalucía, una de las cosas reñidas con el sur es precisamente la prisa. Aquí, abajo, se funciona bien y con rigurosidad en todo, menos en lo de la prisa. Eso, si que no se estila. Ya se sabe que Andalucía se ha equiparada al ritmo de vida de las otras Comunidades, pero lo del estrés a tope, en cuarentena. No solo no se usa, sino que también, la tranquilidad se exporta y se trasmite a los que llegan.
He escrito y dicho que por ejemplo Rafa Jimeno, uno de los mejores diseñadores de éste país, que no es andaluz, porque es mallorquín y que estudió y desarrollo su trabajo en Madrid, capital en la que nadie es extranjero, se vino al sur y desde entonces el eslogan que le he encajado: Lento y seguro. A Rafa cabe exigirle la genialidad que es segura, pero no se le puede pedir una fecha para ella. Las cosas de palacio van en carreta de bueyes, con boyero instructor del pelaito mexicano.
La cosa se contagia, ya lo he mencionado, pero con una rapidez del circuito de Jerez, para eso está ahí al lado.

Se estropeo, ayer mi carroza, concretamente se rompió el mecanismo de la llave de contacto. Me pase, toda la mañana en el negocio de un amigo, para que al filo del medio día, me dijera que no tenía en existencia. Coche, con la grúa y al mecánico, vecino y amigo. Esta mañana, no lo había ni mirado, esta tarde me ha dicho que mañana, vera si puede solucionarlo, arreglando el bombín que dice es lo que está atrancado, y si no, por la tarde que será por la noche cuando regrese del taller, me dirá que es lo que hay que hacer. Total que si tengo suerte, podré disponer del vehículo, el viernes, eso por ser vos quien sois. Vamos como para una prisa. Para ello, me convertiré en un pesado que le telefoneara, mañana y tarde y por la noche me acercare a su casa, para darle la paliza: “rogatoria in person”. Lo tengo claro, la formula para poder disponer del carro, es agotarle la paciencia y a fuerza de ser pesado, y para que no le de el “coñazo”, lo arregle. Estamos en el bendito sur, y ya se sabe : ”donde estuvieres haced lo que vieres”. Lo aprendí hace años y funciona, oiga, funciona.