Ésta página, nació para dar respuesta a una serie de buenos amigos que aseguran que se lo pasan bien con las cosas que escribo. Del “cuadrito” no hablo, aunque no desentonaría, entre lo que sale hoy; con toda modestia ¡garantizado!. Los nuevos, no me han enseñado nada.

Dije en su momento que no sabía si su interés estaba basado en el deseo, o en la caridad. A todos gusta que nos alaben, y a las seguidores de los productores de aucas, continuadores de los trovadores medievales y remontándonos antes a los mala milk de los bufones, muchísimo más. Si quiere que un comunicador le guarde eterna simpatía, cuando se lo cruce, dígale: “muy bueno lo tuyo”, se pondrá mas “lindo” que un pavo real en plena exhibición. Usted posiblemente no sepa el porqué; él, a lo peor tampoco, pero en su fuero interno ha sentido un “gustirrinin” muy especial. Ese día se sentirá el dueño del corral (la redacción).
La segunda causa, es la caridad. Quizás pensaron:”vamos a darle un poco de jabón a éste que ya está mayor”. Tratándose de compañeros de estudios, de oficio y artistas, es más que probable. Tan lejos como que ésta misma mañana, me lo recordaba, con rin, tin,tin, Teresa, de mi Editorial.

Mi sorpresa ha sido descubrir que son más de los que pensaba. “El contador, no engaña”. Y que antiguos amigos de otros países, se han acordado del compañero Toni, e inclusive, muchos nuevos profesionales han sentido curiosidad, por ver como lo hacían (dicho con toda humildad), las vacas sagradas del periodismo del siglo pasado.
La verdad es que con mis articulitos de vez en cuando iba matando la afición. Ahora me debo preocupar con que el Blog, tenga vida. Así que entre la página y escribir libros, ¡estoy ocupadísimo!.
Para que la página sea mas viva y resulte mucho más apetecible para el lector, les incluiré trabajos de otros compañeros que hablan y trabajan en nuestro idioma desde diferentes partes del mundo. Me gustaría que el blog fuera un pequeño referente para dejar claro que somos más de 400 millones de castellano parlantes.

A unos, a otros y a los de más allá, muchas gracias. Confío en no defraudaros.

jueves, 20 de mayo de 2010

LO QUE VA DE AYER A HOY

Tengo una amiga en Málaga, que es técnico de turismo y que me hace unas preguntas, que no es que sean difíciles de contestar, sino que son de las de caminar por el borde del sendero, si te descuidas, te sales.
Son de las que cuando las argumentas, siempre molestan a alguien; uno, el que menos esperas, se siente identificado y por lo tanto ofendido.
Aviso pues para navegantes, no existe intención de fastidiar el día al personal, tampoco al responder estoy señalando a nadie. Expongo un punto de vista que es el mío, y de algún otro veteranísimo profesional, lo hemos comentado entre nosotros, repito que nada peyorativo debe leerse. Quizás sea de las pocas veces, una de las excepciones, que escribo sin maldad, o por lo menos eso intento.
Periodistas: buenos, malos, regulares y arrimados. Los hay, los ha habido y los habra.
Las diferencias que encuentra mi amiga con respecto a los de la generación precedente es hasta cierto punto lógica y se basa sencillamente en la formación recibida, primero; y en la forma de concebir y llevar a término la profesión.
Le llama la atención que los compañeros jóvenes de hoy, se desesperan por un titular y ahí se diluyen como un azucarillo en un café.
Bien, es la moda y el titular debe ser el compendio de la noticia. No voy a seguir porque requeriría mucho tiempo y el desarrollo completo de la definición y el porque ocupa en los apuntes que dicte en su día, dos capítulos completos, unos 15 folios, mas o menos.
Tambien debes de tener presente que no es lo mismo los articulos de opinión, que los del blog, que te llaman tanto la atención, que la redacción de una noticia. En el oficio, el trato que se da a cada uno de éstos sectores es bien diferente. El que lee a Pablo Sebastian, a Manolo Martín Ferran, a Ansón o a Ussía, pongo por caso, quiere conocer el punto de vista de estos profesionales; otro tanto podemos decir del blog, el que nos sigue a Tito Fuentes, a Trotty, a Palacios, etc, y a mí; solo le importa lo que contamos y como vemos nosotros los temas.
Precisamente por esa fidelidad de los lectores, el éxito que ha tenido la pequeña serie que he incluido de las mujeres latinoamericanas; a la gente le importa que se lo cuenten en primera persona y los que están siendo, sin quererlo protagonistas de la situación difícil de los planteamientos antiguos, disfrazados y con pomposos nombres como los de "socialismos bolivarianos".
La gente nueva de la profesión es mas directa escribiendo que nosotros, menos citas, menos recursos, si los comparan con nosotros, pero es que a la vez si hacen lo propio con mi generación y la de los maestros Borges, Vargas Llosa, etc, y si continúan la remontada hasta, por ejemplo Mariano José de Larra, la diferencia en el dominio del idioma es abismal.
No se si he contestado correctamente a ésta primera pregunta, pero por lo menos lo he intentado.
La otra, la del ¿Por qué la rebelión de los abuelos y en ocasiones la ignorancia de la buena educación?. Es más fácil de responder.
En síntesis, los abueletes se limitan a copiar. Hacer como hacen, no es pecado. Y como tienen tiempo miran, observan y se dicen: “si estos se comportan así, será porque es lo correcto, debe ser la moda”. La buena gente imita como “monos”, lo que ve, sin pararse a juzgar si es bueno o malo, si es correcto o incorrecto.
En un avance lo intente explicar en síntesis: ¿Cuál es la ventanilla de reclamaciones de éste país?. ¡¡El juzgado de guardia!!. Si no vas en reclamación de derechos te envían, los que debería solucionar tus problemas porque para eso se les paga y sin tener que pasar penurias para llegar a fin de mes. Para colmo del mal ejemplo, hasta ellos mismos, no se quitan de la boca, los juzgados.
Los de la tercera edad, que ya han perdido la casposidad del franquismo y se han tenido que espabilar, desgraciadamente no todos, todavía existe mucha incultura y más conformismo; en el día a día, no van ha ver a su Señoría, pero no se quitan de la boca la “hoja de reclamaciones”. Estoy de acuerdo, que algún listillo poco escrupuloso hay entre ellos que esgrime la amenaza, con la intención de conseguir tratos de favor y otras ventajas, fuera de lo normal.
Cuando Romero Gorria, y Girón de Velasco, se sacaron de la manga lo del Inserso, los entonces beneficiados iban como corderitos en manada y se pegaban al guía que era un poco el hada protectora de todos ellos. La trataban con una educación exquisita e inclusive, en muchas ocasiones hacían una colecta entre ellos para dar una propina en reconocimiento al trato recibido.
Ahora, ven como viven y lo corruptos que son, los que tendrían que dar ejemplo y atender las demandas, indicaciones, quejas de los que “llaman” sus representados; a los que desgraciadamente y en el mejor de los casos ignoran. Viendo las prebendas que tienen y que ellos desgraciadamente no han dispuesto, intentan sacar tajada, a veces donde no hay, porque muchos de tontos no tienen nada. Otros de descarados, perdido el miedo escénico de la dictadura, tampoco se cortan.
Me queda la educación….Me remito a lo que he escrito, dicho en conferencias y repetido a los que han querido escucharme. En éste país, y ahora lo que falla es la primaria: aquello que se llamaba urbanidad que eran las reglas básicas de la educación para la convivencia. ¿Qué se puede esperar de generaciones que reciben por enseñanza que no tienen que respetar a los mayores?. Eso esta escrito y repartido por los centros docentes, con las bendiciones y los duros del gobierno.
Lo repito estamos en el paraíso de las Autonosuyas, de ellos, de los políticos, donde hay mas titulados superiores que en ninguna otra nación, que no saben comer, y añado, se asegura que según el comportamiento en la mesa, es la educación y el grado de cultura del pueblo. ¿No es preciso que continúe…verdad?.
Los pasados de tacos de almanaque, que están hasta la coronilla de impresentables, hacen lo que ven, y tampoco me explayo, porque creo que se me entiende todo.
Susana, deseo que te haya sabido contestar a tus dos preguntas. Si no ha sido así, lo lamento, he puesto en el empeño, cuanto he podido.
Lo que va de ayer a hoy, es sencillamente la cultura y el saber estar de las gentes. Que con el paso del tiempo a variado, ¡negativamente!.

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